Si me preguntas cuál es la mejor forma de aprender inglés, te diré esto: hazlo parte de tu vida diaria. No se trata solo de memorizar reglas o llenar cuadernos de ejercicios (aunque claro, eso puede ayudar), sino de encontrar maneras naturales y personales de conectar con el idioma.

Una de las cosas más valiosas que puedes hacer es involucrarte activamente con el inglés en contextos reales. ¿Qué quiero decir con esto? Imagina que estás cocinando en casa. ¿Por qué no ver una receta en inglés en YouTube? No solo aprendes vocabulario útil, también escuchas cómo se pronuncian las palabras en un ritmo cotidiano y real.

Otra opción poderosa es hablar contigo mismo. Puede sonar raro, pero hablar en voz alta en inglés, aunque estés solo, es una herramienta excelente. Puedes narrar lo que estás haciendo, expresar lo que sientes o incluso repetir frases que hayas escuchado en una serie. No hay presión, no hay juicio. Solo tú y el idioma.

Algo que siempre recomiendo a mis alumnos es mantener un “diario de inglés”. No tiene que ser perfecto ni largo. Solo escribe cómo estuvo tu día, qué aprendiste, qué palabras nuevas encontraste. Al hacerlo, te acostumbras a pensar en inglés, a formar frases, y a ser consciente de tu progreso.

Y claro, no podemos olvidar el poder de la música y las películas. Escuchar tus canciones favoritas y leer sus letras te permite disfrutar y aprender al mismo tiempo. Puedes pausar, repetir, imitar. Cada canción puede enseñarte nuevas expresiones, sonidos y estructuras que luego puedes aplicar en tus propias conversaciones.

Lo importante no es seguir un camino único o perfecto, sino encontrar actividades que te gusten, que se ajusten a tu estilo de vida y que mantengan tu motivación encendida.

Aprender inglés no es solo una meta académica: es una experiencia que se construye con momentos reales, con curiosidad y con constancia. Y créeme, con el tiempo, todas esas pequeñas actividades suman más de lo que imaginas.

Así que la próxima vez que tengas unos minutos libres, piensa: ¿cómo puedo usar este momento para acercarme un poco más al inglés? Puede ser viendo una escena de tu serie favorita, escribiendo una frase en tu diario o incluso diciéndole “hello” a tu reflejo en el espejo. Cada intento cuenta.